sábado, 16 de octubre de 2021

HOY EL DESAFÍO EN FAMILIA ES EJERCITAR LA PACIENCIA

Sara y Santi tienen 5 hijos de 13, 11, 10, 5 y 3 años.

SUS TIEMPOS, MIS TIEMPOS, LOS TIEMPOS DE DIOS.

Estábamos raros. Todo bien, pero Santi con muuuucho trabajo y horas encerrado en la habitación y, cuando salía, no le daba la vida más que para lo básico (que no suele incluir ocuparse de algo distinto a sobrevivir, jejeje). Y yo con mi trabajo, mil recados, visitas médicas con unos y otros (es decir, almacenando cosas en la cabeza como si fuera un trastero).

Un día y otro y otro, y yo intentando hablar, que fuera capaz de mirarme y de “hola, ¿qué tal estás?”. Porque la vida en estos términos es un poco solitaria, la verdad (para ambos).

En estas, decido que el jueves nos vamos a ir a pasear. Tenemos que hablar de nosotros, de cosas pendientes que decidir, sobre los niños, de…”Hola mi amor” “¡Eres tú!”, de sentir que somos matrimonio, no colegas de piso.

Total que, conseguimos hablar de…¡mover habitaciones! ¡Esto es de broma! ¿Aún encima hay que buscar el momento apropiado? Con lo que nos ha costado encontrar este, no creo que encontremos otro. 

Pero sí, no hay nada como un paseo al sol, al lado del mar, en horario normal, un día de calma matrimonial (sólo hay que juntar un millón de circunstancias, jajajaja) y…la conversación sale.

Hoy el desafío en familia es ejercitar la paciencia. A veces tenemos que pasar pequeños baches y aprender a sobrellevarlos, a esperar el momento adecuado. Es como hacer gimnasia del corazón. Dios nos quiere en cualquier circunstancia y con nuestros defectos, con nuestros alejamientos y acercamientos. Pues lo importante es aprender a querer a nuestro cónyuge los días de sol y los días nublados, aprendiendo a amar de verdad, a imagen de Dios y con la paciencia que el amor brinda.




No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.